Emprender cuando ya tienes un trabajo es algo que a muchos les puede sorprender e incluso desconcertar. Sin embargo, para Reme Escobar es una realidad.
Dueña de la ‘Peluquería Canina Ohana’, decidió dejar su trabajo en una clínica veterinaria para abrir su propio negocio que, aunque esté relacionado con el mundo animal, es muy distinto a todo lo que antes había hecho.
Se instaló en un pequeño local de la calle Teofilo Gautier, en la Chana, un barrio que para Reme «está repleto de gente campechana y humilde». Su negocio, que tan solo tiene dos años de antigüedad, está siendo todo un éxito entre los más queridos de las casas; los perros, y sus dueños.
Su nombre ‘Ohana’, palabra sacada de una película de Disney, define muy bien el trato que Reme da a todos los que cruzan las puertas de su empresa, ya que, tal y como recuerda, Ohana «significa familia».
En esta peluquería pueden entrar todo tipo de perros, desde los más pequeños, como pueden ser los Yorkshire, hasta los más grandes, como los Collie.
Que en un negocio te atienda directamente la dueña hace que el trato siempre sea «familiar e individualizado», algo que para Reme es muy importante y piensa que la diferencia de otros sitios. Por eso mismo, no tiene intención de salir de la Chana o ampliar su empresa.
Los animales son queridos por muchos y odiados por otros, pero, si eres dueño de alguno, Reme Escobar con su peluquería canina te da la solución para que siempre estén impecables.
Fuente: Ideal